Hola, amigos y amigas:
Hoy tenemos un artículo escrito por nuestra colaboradora Rocío Brea que, tras varios cursos de formación en la pedagogía Montessori, ha conseguido dar respuesta a una pregunta que le surgió tras completar su primera formación: ¿dónde queda la creatividad en la Pedagogía Montessori?
Como maestra de educación infantil, éste fue un tema que le trajo de cabeza y que ha hecho que se forme e informe hasta llegar a dar con la respuesta.
Espero que os sea de utilidad y que, si alguna vez os ha surgido esta duda, este artículo pueda ayudaros a responder esta pregunta.
Entendemos como creatividad la capacidad o facilidad para inventar o crear. Ésta es una habilidad innata en los seres humanos que podemos observar desde la infancia hasta el final de sus días. Tras mi primer curso Montessori me di cuenta de varias cosas.
La primera es que el ambiente está preparado, no es fruto del azar. También que los materiales tienen su propia forma de ser utilizados, que viene detallada en las hojas de álbum. Es más, dependiendo del país y de las guías, sólo podrán ser utilizados de esa forma. Tras descubrir todo esto, yo como maestra de Educación Infantil que intenta potenciar la creatividad en sus alumnos lo máximo posible, me quedé muy sorprendida. En un primer momento, llegué a pensar que no había cabida en esta pedagogía para la creatividad. Preocupada por ello, ya que es una pedagogía que me fascinó para poner en práctica en mi aula, decidí seguir formándome y también buscar información sobre la unión que podía haber entre la pedagogía Montessori y la creatividad.
Desde los orígenes hasta la actualidad.
Lo primero que encontré fueron unas palabras de Maria Montessori:
“La creatividad como la capacidad de satisfacer sus necesidades fundamentales como el vestido, la vivienda, la alimentación, el transporte, de múltiples maneras, mejorando los recursos locales disponibles en el medio ambiente”.
Maria Montessori
Esto me hizo darme cuenta de que Maria Montessori, ya en su momento, contemplaba la creatividad. Eso significaba que ésta debía tener presencia en sus materiales o en el desarrollo de esta pedagogía. Pero, ¿cómo exactamente?
En el ambiente preparado podemos encontrar diversidad de materiales adaptados al desarrollo evolutivo de los peques que allí trabajan. Materiales que las guías presentan y que los niños aprenden su uso por repetición de patrones. Ahora bien, en un periodo de concentración donde el peque está trabajando con algún material es imprescindible, como ya conocemos, no interrumpir su trabajo. Esto es así no sólo porque la práctica está consolidando la habilidad, sino porque en este periodo también es usual que los peques descubran otras variantes del material, otras formas de usarlo, nuevas tácticas de solución… ¿No es esta la mayor expresión de la creatividad?
Gabriel García Márquez, gran escritor y premio Nobel de Literatura en 1982, habla en su libro Vivir para contarla sobre su educación en una escuela Montessori:
“No creo que exista método mejor que el montessoriano para sensibilizar a los niños en las bellezas del mundo y en despertarles la curiosidad por los secretos de la vida”.
Gabriel García Márquez
Esta curiosidad de la que habla Gabo es, en la mayoría de los casos, la mecha que enciende la vela, especialmente en los más pequeños.
Actualmente uno de los autores que más se ha centrado en la creatividad, especialmente en la infantil, es Raúl Bermejo el autor del libro Thinks for kids entre otros. Si has seguido nuestro Congreso Internacional Montessori, seguro que ya conoces a Raúl, que ha participado en varios.
“La creatividad es hacer pensar a los niños, que vean que no tiene que ser así porque sí, que un profesor o unos padres no siempre tienen razón. Hay que dejar al niño que se equivoque y que cometa errores”.
Raúl Bermejo
Vemos en esta frase una gran similitud con la pedagogía Montessori donde la premisa es “Seguir al niño” y donde el error es valorado como un aprendizaje. Raúl es fiel defensor de que la creatividad se entrena no solo en la infancia, sino que todos podemos potenciarla. Sus cuadernos de “Grafismo creativo” son una auténtica invitación para potenciar la creatividad. Simplemente con un rotulador y realizando trazos podemos ver cómo la creatividad de cada uno arroja resultados diferentes en una misma tarea.
Tras informarme de esta parte teórica y de la experiencia, quise saber más sobre dónde podemos ver esta creatividad para poder potenciarla al máximo en mis alumnos.
Dónde encontramos la creatividad en aulas o espacios Montessori
La pedagogía Montessori se basa en la experimentación y la exploración. Esto favorece que se satisfaga la curiosidad desde una edad muy temprana. En cuanto a la creatividad, podemos encontrarla en actividades de todo tipo:
- Día a día: Un peque que trabaja o vive en un ambiente Montessori está continuamente utilizando su creatividad para la resolución de problemas. Estos niños que son educados para la vida son y serán adultos con habilidad crítica, capaces de encontrar soluciones utilizando la creatividad y, por ende, novedosas. También lograrán responder a los retos del día a día de forma positiva e incluso veremos personas con una gran autoestima, ya que afrontarán los problemas como oportunidades de aprendizaje.
- Contacto con la naturaleza: este contacto hace despertar en los niños la creatividad. Es una fuente de asombro para ellos y favorece que aparezca la curiosidad sobre por qué la naturaleza es así, cómo se ha creado… Ellos intentarán dar respuesta y ¡son súper creativos! Otra actividad donde podemos ver una clara manifestación de creatividad son los arreglos florales.
- El error: Este gran aliado que ayudará a los niños a entender que en el mundo se comenten errores, que es humano errar y que no conlleva negatividad, sino que es un aprendizaje. También en el error encontramos una fuente de creatividad. Si un peque comete un error realizando una tarea o manipulando un material de cierta forma, intentará darle solución de otra y… ¡Voilá! La creatividad aparece de nuevo.
- Material sensorial: Es el área en que el más se puede destacar la creatividad, ya que muchos de sus materiales tienen numerosas variaciones. Algunas ya podemos encontrarlas pautadas (como por ejemplo plantillas de variaciones de la torre rosa), pero hay numerosas variantes a las que los niños pueden llegar utilizando su creatividad. También se pueden descubrir muchas variantes juntando dos o más materiales como la torre rosa, la escalera marrón, los cilindros de botón…
- Área del lenguaje: En esta área, una de las cosas que se prepara es la escritura. Podemos ver materiales donde tenemos que elegir y daremos rienda suelta a la creatividad, como por ejemplo los resaques metálicos. En ellos, elegiremos los colores que decorarán nuestra creación.
No debemos olvidar que la pedagogía Montessori es una pedagogía respetuosa con el ritmo individual y en la que se promueve la colaboración. Por este motivo, los peques se sentirán más libres y adquirirán los conocimientos de forma significativa y sin ningún tipo de presión y/o prisa. Esto también favorecerá la creatividad de nuestros pequeños, puesto que les daremos alas para potenciar sus habilidades e inteligencias…
Como resumen del hilo que une la creatividad con la pedagogía Montessori podemos terminar la frase de Maria Montessori: “Sigue al niño”… ¡y hallarás su creatividad!.
Por mi parte me gustaría dar las gracias a Rocío por este artículo que considero que puede ayudar a muchas familias y maestros.
¿Te habías hecho esta pregunta antes? Me encantaría que nos dejases un comentario y te invito a compartirlo en tus redes.
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Hace tiempo que descubrí la filosofía de vida Montessori, e intento aplicarla a mi día a día tanto en la familia como en el trabajo. Y la creatividad es algo que se puede apagar con mucha facilidad; y se puede ver en muchos casos, como cuando le das libertad de decisión a un@ niñ@ que anteriormente no ha tenido y si siente incapaz de decidir. Es una pena, y creo que hay que luchar por mantener y potenciar la creatividad de tod@s l@s niñ@s.