Queridos amigos,

Hoy quiero compartir un trabajo que he realizado para la Universidad y que creo que os puede dar una idea del contexto histórico, político y social de la época en la que vivió Montessori y porqué su legado fue tan importante. Si os gusta o queréis añadir algún dato os invito a dejar comentarios y así entre todos lo vamos mejorando. 😉

Y si utilizáis fragmentos de este texto para un trabajo vuestro os pido que citéis este artículo como se debe, empleando la Normativa APA 7 y citándome como autora para que todo sea correcto.

Vida y obra de María Montessori

Maria Montessori nació el 31 de agosto de 1870 en Chiaravalle, una pequeña ciudad de Italia. Aunque se la conoce por su labor como pedagoga y crear un método por nombre su apellido, fue de las primeras mujeres en licenciarse en Medicina, (en una época en el que el mejor futuro de las mujeres era casarse y ser ama de casa), e introduciendo el concepto de interdisciplinariedad, al relacionar Medicina con Pedagogía y otras muchas ciencias.

Siempre fue una mujer de fuertes convicciones: con tan solo catorce años quiso entrar en la escuela técnica de ingenieros, desafiando así los roles de género. Posteriormente, tuvo problemas para entrar en la facultad de Medicina por ser mujer, e incluso tenía que hacer las prácticas de anatomía sola en los laboratorios al anochecer, porque en aquella época que una mujer presenciara el cuerpo desnudo de un hombre (aunque fuese un cadáver), en presencia de otros hombres, era casi un escándalo.

Tal y como siempre comento a mis alumnas del Diplomado universitario, la verdad es que parece que vivió varias vidas, con todo lo que pudo estudiar, (además de lo ya mencionado estuvo también en las facultades de Biología, Psicología, Psiquiatría, Antropología… etc.), los viajes que hizo por el mundo, tanto a Francia, Reino Unido, EEUU, India, España, (en una época en la que viajar era mucho más largo y costoso), y el gran legado de bibliografía que nos dejó: nada más y nada menos que 21 libros forman parte de sus escritos publicados y traducidos a numerosas lenguas.

Ella comenzó su ejercicio profesional haciendo las prácticas de psiquiatría en lo que vulgarmente se llamaban “manicomios”, donde encontró niños con algunas discapacidades abandonados por el sistema y conviviendo con adultos dementes. Se escandalizó al verlo y pidió poder trabajar con ellos para intentar enseñarles a leer, a escribir, a contar, hábitos mínimos de higiene… en definitiva, para que pudieran llevar una vida más digna y autónoma y no estar condenados a ser una carga para la sociedad. Fruto de esta experiencia concibió a su hijo Mario, al enamorarse de su colega Giuseppe Montesano, pero que tristemente tuvieron que mantener en secreto.

Esta parte de su biografía se narra muy bien en la película documental que se estrenó este 2024:

Con la idea de ayudar a estos niños necesitados, Montessori viajó a Francia a estudiar los trabajos de Itard y Séguin, dos médicos franceses, así como a Pestalozzi, el pedagogo suizo.

En base a estos tres antecesores fue elaborando su método en torno a tres pilares básicos: el niño (basándose en el paidocentrismo), el ambiente preparado y el rol del adulto que acompaña.

El 6 de enero de 1907 se inauguró la primera Casa dei Bambini en el barrio de San Lorenzo de Roma, la primera escuela en la que ella siguió desarrollando su método con niños “normales”, (a diferencia de los “ineducables”, como se llamaba a los anteriores). Esto formaba parte de un experimento de social y pedagógico del ingeniero Eduardo Tálamo, que trataba de desarrollar los barrios marginales de las afueras de Roma.

Se utilizó como espacio los bajos de un edificio, y ahí se ubicaron niños y niñas de entre tres y seis años, que al poco tiempo empezaron a aprender modales, a leer y a escribir de forma precoz… Muchos pedagogos viajaron a ver qué tipo de milagro estaba ocurriendo.

A día de hoy, esta primera escuela sigue en funcionamiento y representa casi un lugar de peregrinación al que deseamos viajar todos los que amamos su filosofía.

¿Qué estaba pasando en Europa en ese momento y en concreto en España?

Hemos de tener en cuenta que apenas en 1900 Europa estaba empezando a institucionalizar la educación infantil, algo que hasta el momento era escaso y se veía en todo caso desde una mirada asistencial cuando después de la revolución industrial las mujeres se incorporaron al mundo laboral.

En algunos lugares como Alemania, ya habían comenzado cambios importantes en la mirada a la etapa educativa de la infancia, como el trabajo de Friedrich Fröbel, que ya hablaba de conocer las etapas de desarrollo, darle dignidad al niño, que el maestro hiciese de guía y de materiales manipulativos como los dones.

A finales del siglo XIX el movimiento de renovación pedagógica de “La escuela Nueva” empezó a extenderse por Europa, siendo algunas de las figuras más importantes la propia Montessori, Decroly, Dewey, Freinet, las hermanas Agazzi…etc.

El siglo XX se conoce como El siglo de los niños”, y arranca con la publicación del libro de Ellen Key con el mismo nombre y de gran trascendencia.

Se empieza a hablar de conceptos como la paidología (el estudio científico de la infancia a través de la observación), la eugenesia (que buscaba la mejora de la raza humana en busca del máximo bienestar, pero llegando a plantear cuestiones éticas importantes), así como el higienismo para buscar una vida más sana y la higiene escolar que se promovía desde las escuelas para mejorar la salud de los niños.

En este siglo ocurren acontecimientos muy relevantes, como la creación de la fundación “Save the Children” después de la Primera Guerra Mundial, y la Declaración de los Derechos de los Niños (Ginebra, 1924).

María Montessori se trasladó a EEUU durante la primera guerra mundial, invitada por Alexander G. Bell. Su método tuvo muy buena acogida, se fundó la asociación Montessori americana y se abrieron muchas escuelas, hasta que esta expansión se interrumpió debido a la intervención del profesor William Kilpatrick, que en 1914 escribió el libro The Montessori system examined, en el que declaraba que la teoría Montessori había quedado obsoleta. Aún así su método despertó un gran interés, llegando a instalar un aula con paredes de cristal en una exposición, para que el público viera cómo trabajaban los niños completamente concentrados.

En Italia su método se hizo muy famoso y fue apoyado por Mussolini, abriéndose muchas escuelas y centros de formación. Años después, cuando el dictador intentó aprovechar la fama del nombre de su método para introducir cierto adoctrinamiento belicista, ambos tuvieron un gran enfrentamiento, que terminó con el cierre de todas las escuelas y teniendo Montessori que exiliarse de su país por ser una perseguida política.

Después de la primera gran guerra, Montessori empieza a realizar parte de su trabajo de investigación en España, pasando temporadas junto a su hijo y a su esposa en Barcelona, región que siempre estuvo más abierta a los cambios por la industrialización. La entrada de las ideas montessorianas en Cataluña fue gracias a dos figuras importantes en el movimiento de renovación pedagógica: Eladi Homs y Joan Palau Vera, llegando a haber hasta 70 escuelas Montessori a lo largo del territorio español.

En 1929 funda junto a su hijo la Asociación Montessori Internacional (AMI) en España, convirtiéndose en la encargada de salvaguardar su legado. En 1933 María Montessori estableció su residencia definitiva en Barcelona para protegerse de la dictadura italiana.

Es importante señalar que España siempre tuvo una evolución muy lenta es aspectos educativos respecto a otros países de Europa, pero la Segunda República (1931-1936) si hizo una importante apuesta por incorporar el movimiento de la Escuela Nueva, interesándose por tres corrientes importantes:

  • La pedagogía científica de María Montessori
  • El método Decroly de globalización de la enseñanza y centros de interés
  • El método de Proyectos por William H. Kilpatrick, (colaborador de Dewey)

Al estallar la guerra civil en 1936, la familia Montessori decidió abandonar España y trasladarse junto con la sede de la AMI a Holanda. Posteriormente vivió con su hijo unos años en la India, invitada por la Sociedad Teosófica, donde mantuvo contacto con Gandhi y con Rabindranath Tagore.

Al acabar la guerra en España, comenzó la dictadura franquista de casi cuarenta años, (1938-1975) en la que durante el primer periodo se fusilaron a algunos maestros liberales o representantes de la Institución Libre de Enseñanza y la Iglesia empezó a tener mucho poder en la educación.

Durante la segunda guerra mundial María Montessori y su hijo quedaron atrapados en la India, y en ese tiempo la Dottoressa desarrolló la Educación Cósmica, que es la base del currículo de primaria, (además de la parte más espiritual de su método).

Todo el belicismo de la primera mitad del siglo XX causó en ella un tremendo impacto, llegando a estar convencida de que a través de la Educación podía llegar la Paz al mundo y reflejando en su método un profundo sentimiento Humanista.

Ella quiso volver a su patria y volver a reabrir sus escuelas, al mismo tiempo que seguir formando maestros e extendiendo su método por el mundo.

A nivel internacional, después de la Segunda Guerra Mundial se funda la UNESCO con el objetivo de contribuir a la paz y a la seguridad​ en el mundo mediante la educación, la ciencia, la cultura y las comunicaciones.

Comienzan a extenderse más movimientos pacifistas: la ONU aprueba la Declaración Universal de Derechos humanos (1948) y años después se aprueba la Declaración de los Derechos del Niño (1959). Se empieza a hablar del estado del bienestar, de la igualdad de oportunidades y del principio de comprensividad.

María Montessori fue nominada hasta en tres ocasiones para el Premio Nobel de la Paz (1949, 1950, y 1951). Nunca se lo concedieron, quizá por ser mujer o quizá por sus enfrentamientos políticos.

Muere en Holanda en el año 1952, trabajando hasta el último día de su vida, ya que en sus últimos días había recibido una carta del presidente de Ghana y se acostó en su última noche diciéndole a su hijo que al día siguiente empezarían a organizar su viaje a África.

Dentro de este contexto histórico es importante señalar que España, al haber vivido cuarenta años de dictadura, tuvo un largo periodo de hambre, alta tasa de mortalidad infantil, analfabetismo y declive debido a la autarquía, hasta que al fin comenzó a aperturarse por la necesidad de desarrollo económico, y se empezó a ver la educación como una inversión a futuro (Teoría del capital humano).

En 1969 se publica la primera edición del Libro Blanco de la Educación y el 1970 se aprueba la Ley General de Educación, hitos de gran relevancia en la historia de la Educación en nuestro país y que querían el inicio de posteriores cambios y reformas legislativas.

Para mí es un placer saber que la Dottoressa vivió unos años en nuestro país, que incluso organizó aquí alguno de sus Cursos Internacionales Montessori y que encargó a una de sus discípulas más allegadas, Anna Maccheroni, la dirección de la escuela Montessori de la Diputación de Barcelona. La influencia de Montessori en el proceso de formación de maestros y creación de escuelas en nuestro país es pues indudable.

Si sientes que todo esto conecta con tu filosofía de criar y educar te recomiendo que eches un vistazo a nuestro curso Montessoriza tu Aula, a la formación para docentes y centros educativos o a nuestro Diplomado universitario en Pedagogía Montessori y su Aplicación a la Educación Infantil.

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