¡Muy buenas, amigos!

Hoy quiero compartir una bonita actividad que podemos realizar con peques de en torno a 5 o 6 años. Incluso puede gustar a los más mayores: el planisferio Montessori.

Esta actividad se engloba dentro del área de aprendizaje de Cultura y, a su vez, de Geografía.

En Montessori presentamos primero dos globos terráqueos:

  • El globo terráqueo tierra-agua, que es es uno de los primeros materiales de esta área y se presenta a partir de los tres años y medio o cuatro. Su objetivo es que niños y niñas puedan interiorizar de forma sensorial la forma y la composición de nuestro planeta. Los continentes se representan como una superficie rugosa, que es la lija, y los océanos se representan en color azul.
Planisferio o globo terráqueo tierra-agua de Montessori.

  • El globo de continentes, que es exactamente igual que el de tierra-agua, pero los continentes siguen un código de color.

✓ América del Norte – Naranja.

✓ América del Sur – rosa.

✓ Europa – Rojo.

✓ Asia – Amarillo.

✓ África – Verde.

✓ Australia – Marrón.

✓ Antártida – Blanco.

Este código de color sirve para relacionar diferentes materiales de geografía como el mapa de continentes. Este sistema de codificación por colores da al niño una fuerte señal visual para ayudar a identificar los diferentes continentes de forma sensorial.

Materiales Montessori del área de geografía.

¿Cómo hacer el planisferio?

El planisferio Montessori es una actividad que les encanta a los peques a través de la cual podemos explicar cómo pasamos de las tres dimensiones que tiene una forma esférica a las dos dimensiones que se representan en un mapa (en este vídeo se explica todo con mucha claridad).

Para ello, podemos preparar el globo terráqueo con plastilina o masa, para ello necesitaremos 8 colores y un modelo de mapamundi para fijarnos y hacer las formas de los continentes y un cuchillo de seguridad.

Yo compré dos paquetes grandes de plastilina azul pero luego me di cuenta que me quedé un poco corta para hacer la esfera y tuve que comprar dos más.

Te presento el planisferio Montessori, una idea genial para hacer una actividad con tu peque en la que participéis los dos y aprendáis jugando.

Paso 1: amasar y darle forma a los continentes del planisferio Montessori.

En un primer momento comenzamos a hacer las formas con nuestras manos. Sin embargo, luego nos dimos cuenta que era más sencillo utilizar el mapamundi como modelo y colocar la plastilina encima para ver si íbamos bien. Esto es fundamental, porque una parte importante del éxito de esta actividad es que la escala de los continentes guarde proporciones adecuadas y que nos quepan todos en el globo que preparamos.

Le vamos dando forma a los continentes utilizando como guía el propio Planisferio Montessori impreso.

De este modo fuimos amasando la plastilina con un rodillo para que quedase plana y luego recortando las formas con un palillo de la forma más cuidadosa posible.

Las manos de un niño dando forma a los continentes siguiendo el código de color Montessori.

En el siguiente vídeo se puede ver cómo teníamos los continentes ya preparados para pegar sobre la esfera:

Paso 2: el peque comienza a conocer el Planisferio Montessori

Una vez que tenemos el globo terráqueo preparado podemos interactuar un poco con el peque. Le preguntaremos para que busque dónde está cada continente. Nos daremos cuenta de que es imposible ver todos a la vez de un solo vistazo, por eso tenemos que ir girando la esfera con nuestras manos. Es por esta razón que hace unos cuantos años decidimos representar el mundo en dos dimensiones, para ver todo a la vez. En esta actividad vamos a comprender precisamente cómo hacemos esto.

Una vez que hemos trabajando todas nuestras cuestiones con el globo terráqueo, nos preparamos para hacer el corte por el océano Atlántico, para lo cual podemos hacer primeramente una marca para asegurarnos por dónde vamos a cortar y que habrá una parte de Asia que quede en una de las semiesferas y lo mismo pasará con Antártida, que quedará dividida en dos.

Cuando ya tenemos las dos mitades, las colocamos en la posición correcta para que encaje con el mapamundi lo máximo posible. Aquí nos daremos cuenta de que hemos podido cometer algunos errores, como que alguna ubicación no sea del todo correcta o que los océanos sean demasiado anchos, jeje.

Último paso antes de pasar el molde de  dimensiones a dos, como requiere el planisferio Montessori.

Y por último, trataremos de aplastar al máximo posible cada una de las semiesferas para pasar de las tres dimensiones del globo terráqueo a las dos dimensiones de los mapas.

Este es el resultado de nuestro planisferio Montessori, una actividad fabulosa para aprender jugando con tus peques.

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